¿Sabes de donde viene la palabra “tomate”?
El tomate es originario de los bajos Andes, y fue cultivado por los aztecas en México. La palabra azteca "tomatl" significaba simplemente algo como “fruta hinchada” o “fruto gordo de agua”, y los conquistadores españoles lo llamaron "tomate".
¿Cuándo llegó a Europa?
Fuera del continente americano, se empezó a cultivar antes en Italia que en España, ya que hay escritos italianos de 1544 que hablan de ello. Fue Hernán Cortés quien lo trajo a Europa en el siglo XVI, después de capturar la ciudad de Tenochtitlán en 1521.
¿Fue el tomate rojo desde sus inicios?
De América se trajo una variedad de tomate más pequeño y amarillo. Cuando los recibieron los italianos, los bautizaron como manzanas doradas o pomodoro. Fue después cuando los botánicos italianos realizaron cruces con nuevas variedades traídas del Nuevo Mundo y desarrollaron los tomates rojos.
¿Ya en sus inicios se usaba en la cocina?
Se lo cosechó durante 200 años solo para ser un objeto decorativo de las mesas, realizando guirnaldas, gracias a la capacidad genética para obtener nuevos colores y formas.
¿Conoces por qué está compuesto el tomate en más de un 90%?
El tomate es en un 94% solamente agua, por lo que es una fruta de bajísimo poder calórico, con solo 18 Kcal, pero es muy rica en vitaminas, antioxidantes y fibra alimentaria.
El tomate es un fruto que nos ha acompañado a lo largo de la historia, celébralo con los nuestros de la mejor manera 👏🍅
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